miércoles, 12 de diciembre de 2012

47

"Últimamente, me despierto sudando. Y lo que es peor: cuando ya estoy despierta, mi mente me juega malas pasadas, haciéndome sentir un pánico que no recordaba desde los peores años del divorcio. No hago más que pensar en mi matrimonio fracasado, en la vergüenza y furia latentes que aún me quedan. Para colmo, estoy pensando en David otra vez. Discuto mentalmente con él; estoy furiosa y sola y recuerdo todas las maldades que me dijo o hizo. Además, no puedo dejar de pensar en la felicidad que vivimos juntos, en la delirante emoción de los buenos tiempos. Tengo que controlarme para no levantarme de esta cama de un salto y llamarlo desde India en mitad de la noche para - no lo tengo muy claro - acabar colgándole el teléfono probablemente. O rogarle que vuelva a quererme. O leerle una acusación feroz donde enumero todos los defectos de su carácter.
¿Por qué estoy acordándome de este tema otra vez?
Ya sé lo que me dirían todos los veteranos del ashram. Me dirían que es perfectamente normal, que todo el mundo pasa por esto, que la meditación profunda lo hace aflorar todo, que sirve para librarte de los "demonios residuales"... Pero estoy en un estado tan sensible que no me da la gana de tragarme ese rollo y me resbalan las típicas teorías hippies de esta gente. Ya me doy cuenta de que me aflora todo, muchas gracias. Como me afloran las ganas de vomitar. Igual.
No sé muy bien como, pero logro quedarme dormida otra vez y, mira por dónde, tengo otro sueño. Esta vez no es una serpiente, sino un perro grandullón y malvado que me persigue y me dice: "Te voy a matar. ¡Te voy a matar y a comer!". 
Me despierto llorando y temblando. No quiero molestar a mis compañeras de habitación, así que voy a esconderme al cuarto de baño. ¡El maldito cuarto de baño de siempre! Santo Dios, aquí estoy estoy en un y cuarto de baño otra vez, en mitad de la noche otra vez, tirada en el suelo otra vez, llorando de lo sola que estoy. ¡Que harta estoy de este mundo tan frío y de sus horribles cuartos de baño!
Al ver que no paro de llorar, me hago con un cuaderno y un bolígrafo (el último refugio del granuja) y me siento junto al retrete una vez más. Encuentro una página en blanco y escribo mi petición de ayuda de siempre: 
"NECESITO TU AYUDA".

Suelto un profundo suspiro al ver que, escribiendo con mi letra, esa gran amiga mía  (¿quien será?) acude lealmente a rescatarme:
Aquí estoy. No hay ningún problema. Te quiero. Nunca te abandonaré..."

sábado, 8 de diciembre de 2012

Re-aprendiendo

Hace muchísimo tiempo que no escribía por aquí. Han pasado una infinidad de cosas y ciertamente no podría expresarlo todo en tan pocas líneas, tendría que estar escribiendo de aquello que he vivido un buen par de horas para poder hablar de todo, para que no se me fuera ni el más mínimo detalle, para abarcar absolutamente todo. Quizás en algún momento pueda hacerlo.

Siento que he logrado obtener grandes avances en todo este tiempo, he logrado por fin cerrar etapas y afortunadamente estoy abriendo otras que jamás pensé que pudiese abrir. Son ciertamente todo un misterio para mi y me dejan totalmente asombrado porque, es decir, ¿Quien iba pensar que una persona como yo pudiese comenzar a abrirse a este nuevo mundo? Es una completa locura la verdad.
Han sido meses difíciles, pero significativos en donde he pasado muchas pruebas, ellas incluyen desilusiones, peleas, malos ratos, pero también incluyen alegrías, re-encuentros, segundas oportunidades, coincidencias. No puedo evitar pensar en que todo esto ha sido totalmente necesario, ha sido algo imprescindible y ciertamente si no hubiera ocurrido nada de esto no habría logrado evolucionar como persona, no habría logrado encontrar nuevas facetas y ciertamente no habría podido enmendar y aprender de mis errores.

Hoy veo las cosas de una forma muy diferente a lo que veía todo hace meses atrás. No puedo creer que todo haya cambiado de un momento a otro frente a mis ojos y sobre todo, no puedo creer que me haya dado cuenta de que estaba totalmente dormido, que la vida que pensé que estaba viviendo en realidad no lo era y que era imprescindible buscar algún camino, encontrar una oportunidad para poder despertar (o por lo menos estar consciente de mi estado e intentar abrir los ojos, que es lo que hoy estoy haciendo). 
Creo que una de las cosas que agradezco efectivamente es ver todo desde un nuevo prisma. Me sorprende entender que todo lo que me ocurrió hace un tiempo atrás no fue culpa mía, no fue culpa de los demás, simplemente fueron situaciones que ocurrieron producto de que todos estábamos absolutamente dormidos y no sabíamos que es lo que ocurría, las pelas, los disgustos, los enfrentamientos, las rupturas, todo fue a causa de nuestra inmovilidad e inconsciencia. Ahora puedo entender que no hay culpables, las cosas simplemente son, no se pueden catalogar como buenas o malas, hay que atenerse a los hechos, ver la realidad y seguir adelante, es todo lo que importa en esta vida. Los seres humanos tendemos a formar historias en nuestras mentes, nos desviamos de lo que es realmente real y coloreamos la vida y creamos una "falsa realidad" según nuestros criterios, dejándonos llevar por las vivencias del pasado, por lo que nos ha pasado antes, por esas decepciones, por los malos ratos. Vivimos, por supuesto en el presente, pero no podemos evitar cargar con nosotros mismos las cadenas del pasado y así también preguntándonos que pasará más adelante. Es así como no nos preocupamos del ahora, del presente y preferimos transportarnos entre aquellos dos mundos ignorando que todo lo que tenemos es en este momento, vivir es hoy, es ahora.  


Para mi es algo que me costó mucho entender y, sinceramente, creo que aún no puedo vivirlo del todo bien ya que esto toma tiempo. No es que un día comprendiste todo esto y dijiste "desde este momento mi vida toma un vuelco y comienzo a vivir como si no hubiera más", si no que es un proceso, debes trabajar con tu mente, con tus emociones, sentimientos y pensamientos. Creo que el más grande problema al cual tenemos que enfrentarnos hoy en día para lograr cumplir nuestros sueños es al ego que portamos cada uno de nosotros, el cual nos contamina una y otra vez con pensamientos repetitivos y, por si fuera poco, negativos. Tomar conciencia, observar lo que ocurre en nosotros mismos es la clave para comenzar a obtener una mayor plenitud y ser felices. No puedo mentirles, hay ocasiones en los que he querido abandonar todo y me he dicho a mi mismo "¿Por qué no dejo todo esto hasta aquí? Es demasiado y estoy cansado", pero recuerdo una frase que leí en un libro que dice que si te deprimes se te hará costumbre y no podrás salir adelante. Creo que es la razón por la cual hoy estoy en este nuevo camino dispuesto todos los días de mi vida a mejorar, cambiar y lograr a un estado de mayor plenitud. Me ha tomado mucho tiempo y trabajo, ya que no es fácil librarte de los apegos (y sobre todo descubrirlos) y darte cuenta que tu vida se estaba basando en el tener y que el verdadero secreto de nuestra existencia es en verdad el Ser. No hay otra. Debes procurar en primera instancia ver todo lo que está mal en ti, ser totalmente honesto y comprender que todo a lo cual uno se aferra externamente es pasajero e inestable y puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos. Por ello es importante vivir desde el estado del Ser, ya que si todo lo que está afuera cambia y sabemos que todo es pasajero y que lo importante está en nuestro interior, podremos ser felices.


No puedo definir cual es el estado en el que hoy me encuentro, porque la verdad aprendí que no debo tratar de buscar definiciones para mi, para lo que soy, simplemente puedo decir que "Yo soy", me parece lo más acertado. No soy la persona que fuí hace muchísimo tiempo atrás, soy diferente, solamente sé que estoy más conforme hoy en día con lo que voy viviendo. Han habido momentos (incluso hoy) en donde he notado infelicidad presente en mi, pero me detengo a buscar las causas, indagar de donde proviene para luego trabajar en ello, aunque cueste, pero creo que a pasos lentos pero seguros lograré ir amoldando todo. Solo quería dejar esto plasmado y como una especie de introducción para toda la nueva vida que desde ahora comienza para mi. Me causa mucha alegría comprender hoy que todo lo que ocurrió en el pasado, pasado es y que el futuro no ha llegado y que no debo preocuparme de aquello. Lo importante es vivir el día a día, el presente y evitar cualquier tipo de deseo de cambio, disfrutar la vida tal cual es ahora. Es algo que de a poco voy implementando y creyendo en ello. Lo más importante de todo es creer en uno mismo, conocerte, tomar conciencia de lo que estás viviendo, de lo que haces, sobre todo de lo que piensas para entender que tu vida es un resultado de tus pensamientos. 

No les mentiré, aún sigo luchando incansablemente con mi mente. No es fácil lograr apaciguar una gran cantidad de pensamientos que vienen y van y tener que controlarlos como quien controla a pequeños niños de un jardín infantil, pero merece la pena en un 100%. Creo que si no me hubiera dado cuenta de esto sufriría de manera intensa por cualquier tipo de situación, por cualquier persona, sin entender que el sufrimiento me lo había hecho yo mismo al no controlar mi forma de pensar. Espero que todo este nuevo camino me vaya ayudando a mejorar, a forjarme para el futuro. Por primera vez sé que es el camino correcto.